Este artículo fue publicado hace ahora un año en el portal informativo ruso Meduza. Su autor, el periodista de investigación Iván Golunov, se haría mundialmente famoso hace unos meses por su detención, las movilizaciones de apoyo que le siguieron y su casi inmediata puesta en libertad. [NT]
Tras las revueltas de la basura que tuvieron lugar en la región de Moscú en el año 2018 varios vertederos y polígonos situados allí fueron clausurados y Moscú se encontró ante el hecho de que no tenía donde meter su basura. Ya se encuentra en marcha la construcción del polígono Shiyes en la región de Arcángel pero ahí no terminará el asunto. Como ha podido saber Meduza la intención es también trasladar los residuos de Moscú a la región de Kaluga, a otros distritos de la región de Arcángel, así como a varias regiones más de la Rusia europea. Para el embalaje de toda esta basura están siendo construidos tres terminales de carga, uno de ellos dentro del Tercer Anillo de Transportes, en las proximidades de la estación de metro Volgogradski Prospekt. El enviado especial de Meduza Iván Golunov explica los planes del ayuntamiento de Moscú para el traslado de los residuos a otras regiones de Rusia.
940 camiones que nadie ha visto
En el último año en la región de Moscú las protestas han obligado a clausurar varios importantes vertederos (Kúchino en Balashija, Tsariovo en Sérguiyev Posad, Kulakovski y Syánovo en el sur de la región) que recibían 1,3 millones de toneladas de basura cada año.
En verano de 2018 el gobernador de la región de Moscú Andréi Vorobyov decía que los vertederos de la región podrían dar cabida a hasta 4,6 millones de toneladas de basura al año. Los vecinos de la región generan en promedio unos 3,8 millones de toneladas de residuos domésticos y aproximadamente 1,5 millones de toneladas de residuos de gran tamaño. En la región de Moscú funcionan unas 20 estaciones de clasificación que reciben unas 880 mil toneladas de basura al año.
Según datos el Ministerio de Medio Ambiente de la región de Moscú los 14 vertederos de la región que se encuentran en funcionamiento solo podrán recibir 3,7 millones de toneladas de residuos al año. Eso a duras penas cubre las necesidades propias de la región y, desde luego, no deja espacio para la basura de Moscú, que supondría varios millones de toneladas más.
Los moscovitas generan cada año casi 8 millones de toneladas de residuos domésticos y unas 2,4 toneladas de residuos de gran tamaño (muebles, electrodomésticos, escombros). En la capital se encuentran en funcionamiento tres incineradoras de residuos con una capacidad no superior a 770 mil toneladas al año y varias estaciones de clasificación que tratan aproximadamente 2 millones de toneladas al año.
Para solucionar el problema al menos en parte las autoridades de Moscú asignaron en 2017 3,4 mil de millones de rublos para la apertura del polígono Malinki en Nóvaia Moskvá, en el que se podría enterrar anualmente más de 1 millón de toneladas de residuos. Pero las protestas hicieron que Serguéi Sobianin ordenara la paralización de las obras.
Al final, descontando la basura que queda en el interior de Moscú tras la clasificación, cada año sería necesario trasladar fuera más de 6,6 millones de toneladas de residuos domésticos sólidos. En los últimos años se han abierto dos polígonos en la región de Vladímir, otro en la de Tula y otro en la de Smolensko. No obstante, según su documentación técnica entre todos no podrán recibir más de 910 mil toneladas de residuos al año. Quedan al menos cinco millones de toneladas de basura. Para transportar un volumen semejante se necesitaría el uso diario de unos 940 camiones.
Las seis compañías contratadas por la ciudad para la recogida de basuras no revelan el destino de los residuos tras el cierre de la mayoría de los polígonos de la región de Moscú. Al mismo tiempo se están multiplicando en la región de Moscú y las regiones colindantes las denuncias de nuevos vertederos ilegales.
Mejoras a cambio de basura
A mediados de octubre de 2018 las autoridades de las regiones de Moscú y Arcángel aunciaron la creación del ecotecnoparque Shiyes. Los residuos de la capital serán transportados hasta la estación ferroviara del mismo nombre en la frontera entre la región de Arcángel y la República de Komi. La administración afirma que Shiyes podrá acoger unas 500 mil toneladas de residuos al año durante 20 años. De la presentación del proyecto sigue que no se construirá en Shiyes una planta de clasificación y tratamiento de residuos. La basura será enviada por ferrocarril en forma de briquetas prensadas y embaladas. El spot publicitario del proyecto cita utiliza el embalaje de los equipajes en cintas de plástico en los aeropuertos para ilustrarlo.
La región de Arcángel fue seleccionada porque conducen hasta la misma vías férreas no demasiado sobrecargadas. Hasta el momento se ha acordado un viaje diario de Moscú a Shiyes de un tren de carga de 56 semivagones según explica una fuente de la empresa Ferrocarriles de Rusia. La carga útil de un semivagón se eleva a 70 toneladas, por lo que Moscú podrá mandar anualmente a Shiyes una tonelada y media de residuos.
Desde el mes de agosto los vecinos de las poblaciones aledañas vienen acudiendo a concentraciones de protesta. Uno de los detonantes vino a ser la publicación de un telegrama interno de Ferrocarriles de Rusia relativo a la apertura de la ruta Lúbertsy-Shiyes por la que se transportarían los residuos domésticos de Moscú. En respuesta a las protestas las autoridades de la capital han prometido destinar partidas del presupuesto municipal a la reparación de infraestructuras públicas y obras de mejora en poblaciones situadas en las cercanías del futuro polígono. Asimismo el ayundamiento de Moscú tiene previsto el lanzamiento de una campaña publicitaria en los canales televisivos de la región de Arcángel y en las redes sociales. Así, algunos empleados de la empresa Tecnologías de la Información de Moscú asistieron a una reunión celebrada entre altos cargos de los gobiernos regionales de Moscú y Arcángel. Dicha compañía es la encargada de prestar soporte informativo al ayuntamiento en las redes sociales. Precisamente fueron sus empleados quienes publicaron posts y comentarios en apoyo al programa de renovación.
Estas atenciones del ayuntamiento para con la región de Arcángel se explican por el hecho de que, además de Shiyes, se podrían construir allí varios polígonos más para el enterramiento de residuos capitalinos.
Meduza ha sabido que está prevista la construcción de otro polígono en el término de Nimenga, a 10 kilómetros del mar Blanco. Según la fuente consultada, conocedora del proyecto, el ecotecnoparque será construido en la antigua cantera de una explotación forestal, no muy lejos de una estación de ferrocarril. Según datos del Registro de Rusia se trataría de terrenos pertenecientes a Ferrocarriles de Rusia con uso autorizado "para empresas ferroviarias". El Instituto MosvodokanalNIIproyekt tiene previsto abrir un concurso para la realización de prospecciones de ingeniería para el desarrollo del proyecto Ecotecnoparque Nimenga.
Las elecciones de la basura
Ni siquiera varios polígonos en la región de Arcángel resolverán el problema del enterramiento y tratamiento de los residuos moscovitas. Por lo que los altos cargos de Moscú están buscando la manera de superar las reticencias de los habitantes de otras regiones más cercanas.
A finales de enero de 2017 la aldea Mijali, situada en el distrito Iznóskovski, uno de los menos poblados de la región de Kaluga, recibió la visita de varias motonieves que traían una delegación de Moscú encabezada por el jefe del Departamento de Vivienda de la capital Gasán Gasangadzhíyev. Explicaron que estaban buscando un emplazamiento para la construcción de una planta de tratamiento de residuos. Una semana más tarde, el 5 de febrero, se celebró una asamblea de vecinos en la que casi todos votaron en contra de la obra y exigieron no realizar el cambio de la calificación agraria de las tierras por otra industrial.
Formalmente la cuestión de la recalificación de los terrenos debió haber sido resuelta por los diputados del consejo rural. Pero los diputados locales tampoco accedieron a la misma y se negaron a celebrar audiencias públicas sobre la modificación del plan general de ordenamiento rural. Entonces, el 24 de agosto de 2017 la administración del distrito disolvió el consejo rural y convocó nuevas elecciones. Asimismo se prohibió toda reunión pública fuera de dos localizaciones autorizadas: la capital del distrito Iznóskovo y la población de Miátlevo, a 45 kilómetros de Mijali.
En vísperas de las nuevas elecciones convocadas para el 27 de mayo de 2018 la población de la aldea experimentó un vertiginoso crecimiento: si al 1 de enero el censo electoral de Mijali contaba con 131 votantes, en mayo ya sumaba 241. Según consta en el acta de la comisión electoral ni siquiera esta estaba preparada para un crecimiento semejante y solo había imprimido 230 papeletas. Grupos activistas pudieron averiguar que la mayoría de los nuevos vecinos estaban empadronados en dos casas de la aldea cuyos propietarios llevaban tiempo viviendo en Moscú. Junto al número de electores también creció el de candidatos. Si en las elecciones anteriores ocho candidatos aspiraron a los siete escaños del consejo, en 2018 el número de pretendientes aumentó hasta los 28.
La comisión electoral denegó el registro a seis de los diputados del mandato anterior por defectos de forma en la documentación aportada. De los siete nuevos diputados solo dos resultaron estar empadronados en Mijali: los demás eran empresarios, propietarios de constructoras, registrados en Moscú y Kaluga. Fue nombrado presidente del consejo de diputados el vecino de la capital regional Alekséi Tiurenkov, empleado de uno de los departamentos del ministerio de desarrollo económico de la región de Kaluga.
Poco después de las elecciones los nuevos diputados convocaron sesiones públicas dedicadas a la recalificación de una parte de los terrenos para permitir la construcción del ecotecnoparque Kaluga. Según el proyecto desarrollado por MosvodokanalNIIproyekt las obras del ecotecnoparque se llevarán a cabo sobre 1600 hectáreas en las que se dispondrá un complejo de clasificación de residuos, una fábrica de reciclaje de plásticos, un complejo de generación de energía térmica y eléctrica, e invernaderos para cultivo de hortalizas. No obstante, solo se trataría de una primera etapa de la obra que comprendería también la creación de un emplazamiento para la ubicación de residuos no reciclables pertenecientes a las clases 2 a 5 en la escala de peligrosidad.
Está previsto llevar al polígono de Mijali 1,378 millones de toneladas de residuos. Cuando concluya la construcción del complejo de clasificación este volumen aumentará hasta los 1,813 millones de toneladas; se podrán enterrar en el polígono algo más de 900 mil toneladas. La capacidad total del polígono constituirá 40,1 millones de toneladas de residuos que se conservarán durante 46 años. Los autores del proyecto no concretan qué pasará a la finalización de este período. Encarga el construcción del ecotecnoparque la sociedad ProfZemResurs cuyo principal propietario, según datos del registro público, es Mosvodokanal SA, propiedad del gobierno de Moscú. ProfZemResurs está presidida por el exfuncionario del Departamento de Obras de Moscú Oleg Pankrátov, al mismo tiempo vicedirector de Tejnopark SL, empresa que alquila los terrenos en Shiyes, región de Arcángel.
Las regiones de Arcángel y Kaluga no son las únicas donde el gobierno de Moscú podría ubicar los residuos domésticos. Según explican a Meduza dos fuentes de la alcaldía capitalina se contemplan como posibles destinos para la basura otras dos plazas, concretamente en las regiones de Yaroslavl y Kostromá. También la fuente de Ferrocarriles de Rusia confirma a Meduza que se están llevando a cabo negociaciones para el traslado de los residuos a dichas regiones. El proyecto previsto para la región de Kostromá fue mencionado anteriormente por el vicepresidente del Consejo de Estudios de Fuerzas Productivas del Ministerio de Desarrollo Económico de la Federación Rusa Alekséi Sitin: "Conozco un sitio: se trata de un antiguo cuartel de reserva del Ejército de Tierra cerca de Kostromá. Son unos 500 kilómetros cuadrados en total, contando con vías de acceso (también ferroviarias) y ofrece distintas modalidades de almacenamiento: búnkeres, espacios abiertos, etc.", afirma.
La creación de un polígono en ese territorio es un proyecto del Ministerio de Defensa de la Federación Rusa. El año pasado esta autoridad creó la empresa pública Oboronpromekológuiya encargada de desarrollar el proyecto de creación de fábricas de reciclaje de residuos en terrenos militares no utilizados. "Hay negociaciones con los militares, pero no son muy intensas y se encuentran en una fase muy temprana", afirma la fuente del gobierno de Moscú.
El complejo de Boynia
Para sacar la basura de Moscú es necesario embalarla y cargarla. En el transcurso de la presentación del proyecto de Shiyes los altos cargos de Moscú mencionaron la construcción de una terminal de carga en el complejo depurador de Lúbertsy situado en el distrito de Nekrásovka. Sin embargo, como ha podido saber Meduza, instalaciones parecidas también se están construyendo en otros distritos de Moscú, por ejemplo, en los polígonos industriales de Chertánovo y Taganka. Según la documentación los están construyendo las mismas compañías encargadas de la creación de polígonos de gestión de residuos en otras regiones.
El 23 de octubre de 2018 el instituto MoszhilNIIProyekt, propiedad del ayuntamiento de Moscú, licitó el desarrollo del proyecto de ventilación para una terminal industrial de carga cuya construcción se estaba llevando a cabo en el recinto de la estación ferroviaria abandonada Boynia, en las proximidades del metro Volgogradski Prospekt. El emplazamiento de la obra del futuro complejo se encuentra a unos 450 metros de las viviendas más cercanas. Según los requisitos técnicos la ventilación deberá depurar el aire de polvo, amoníaco, ácido sulfhídrico, clorhidrato, benceno, hexano y otras sustancias. Anteriormente un proyecto de ventilación con análogos requisitos técnicos había sido encargado por las autoridades municipales para otra terminal de carga situada en el distrito moscovita de Nekrásovka. El corresponsal de Meduza se pudo cerciorar, tras haber visitado los emplazamientos de las obras, que las extensiones de Taganka y Nekrásovka coinciden plenamente. Según datos del registro público a finales de agosto de 2018 Mosvodokanal SA cedió el terreno de Nekrásovka a la compañía Profzemresurs, encargada de la construcción de un polígono de tratamiento de residuos sólidos en la región de Kaluga.
Meduza no ha podido acceder a los contratos de construcción de las terminales de carga de Moscú, ni de los polígonos de tratamiento de residuos de las regiones de Arcángel y Kaluga. Por otro lado, tampoco las fuerzas de seguridad han podido dar con los permisos de construcción. Sin embargo, las pesquisas sí demostraron que la construcción del polígono de la región de Kaluga y de la terminal de Taganka, al parecer, corren a cargo de una entidad próxima a la alcaldía de Moscú.
En la región de Kaluga las fuerzas de seguridad impusieron una sanción a la empresa Roud Grupp SL encargada de las obras de construcción por ausencia de los permisos correspondientes. Los obreros de la obra de la terminal de carga de Taganka no quisieron indicar el nombre de la compañía al corresponsal de Meduza aunque sí aportaron un número de teléfono para contactar con la dirección que resultó ser el mismo de los datos de contacto de Roud Grupp.
Por otro lado, en Shiyes, región de Arcángel, los obreros explicaron a los activistas locales que fueron contratados por la empresa pública moscovita Vías Automovilísticas (responsable de la reparación y el mantenimiento de las calzadas capitalinas).
Roud Grupp fue registrada a finales de 2010. Con menos de un año de vida la compañía ya había ganado en una importantísima licitación promovida por el alcalde Serguéi Sobianin por valor de 522,6 millones de rublos para la sustitución del asfalto por adoquines en las calles centrales de la ciudad. En 2014 Roud Grupp se había convertido en el mayor contratista de Vías Automovilísticas en la sustitución de asfaltos y bordillos en las principales arterias de Moscú. Según pudo saber RBK, Roud Grupp recibe aproximadamente una tercera parte de los contratos de Vías Automovilísticas y empresas vinculadas. Además el grupo empresarial también intervino en los acondicionamientos previstos en el marco del programa Mi calle. Tras una serie de publicaciones de RBK dedicadas a Roud Grupp, otra sociedad que no revela los nombres de sus accionistas, Árktika Invest SA, se convirtió en su propietario principal.
La mayoría de los fundadores de Roud Grupp actualmente ocupan cargos en el ayuntamiento de Moscú. Alekséi Ieliséiev, al que perteneció el 25 % de la participación en la compañía, encabeza desde el año 2016 el Departamento de Reformas Generales de la capital, organismo que supervisa el programa Mi calle. Alekséi Menshov (expropietario del 25 % de las acciones) es vicepresidente de Vías Automovilísticas. Y el cofundador y antiguo director de Roud Grupp, Mijaíl Nésterov, de 36 años, fue, según datos registrales, el primer Director General de Tejnopark SL que actualmente arrienda los terrenos para la construcción del polígono de Shiyes.
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